Cómo dormir en el embarazo

El sueño es un factor muy importante en la vida de las personas: es el encargado de regular la presión arterial y la frecuencia cardíaca y, además, también ayuda a regular las emociones. Sin embargo, dormir durante el embarazo puede ser un desafío para muchas mujeres debido a los cambios físicos y hormonales que ocurren en este período. Resumimos aquí alguna de las causas por las que la mujer embarazada puede tener insomnio:

1. Molestias físicas, lumbalgia: debido al cambio anatómico que se produce es bastante habitual la aparición de cierto dolor, que generalmente afecta a la parte baja de la espalda. A la hora de dormir, la posición más recomendable es de lado, mejor del izquierdo para favorecer la circulación. Puede resultar útil colocar alguna almohada entre las piernas al dormir.
2. Reflujo gastroesofágico: puede aparecer generalmente desde el segundo trimestre de embarazo, y en ocasiones provocar insomnio por la molestia. Evita una cena abundante y aquellos alimentos que pueden favorecer el reflujo como chocolate, cafeína o alimentos picantes.
3. Apnea del sueño: debido a la rápida ganancia de peso que se produce, algunas mujeres con cierta predisposición pueden desarrollar una apnea del sueño durante su embarazo. Entre los síntomas tenemos ronquidos, boca seca al despertar, cefalea matutina, somnolencia diurna excesiva, sueño no reparador o insomnio. Es fundamental acudir a un especialista y realizar un estudio de sueño en estas mujeres para poder iniciar el tratamiento lo antes posible y corregir la alteración respiratoria.
4. Síndrome de piernas inquietas: debido al estado de déficit de hierro que acompaña en general al embarazo y postparto, muchas mujeres pueden presentar este trastorno, directamente relacionado con el metabolismo del hierro. Los síntomas incluyen molestias en las piernas, que se alivian transitoriamente con el movimiento y que aparecen al estar en reposo, preferiblemente en la tarde-noche. ES una causa muy importante de insomnio y mala calidad de sueño. Puede ser necesario realizar un estudio de sueño y una analítica para evaluar el estado del hierro, y en función de ello, se puede indicar suplementos de hierro para corregir el problema desde su origen.
5. Trastornos del estado de ánimo: el embarazo puede ser un periodo en el que aparezcan ansiedad o depresión. Los factores hormonales, junto con el miedo a la maternidad o el miedo al parto pueden favorecerlo. Es fundamental consultar con un especialista lo antes posible.