En la Clínica CISNe, trabajamos con un enfoque multidisciplinar para abordar los trastornos del sueño, y dentro de este equipo, el otorrinolaringólogo desempeña un papel fundamental. Su labor va mucho más allá de tratar problemas de oído, nariz y garganta: el especialista en otorrinolaringología es clave en la evaluación y tratamiento de los trastornos respiratorios del sueño, especialmente en aquellos casos en los que existen obstrucciones anatómicas que dificultan una correcta respiración durante la noche.
El sueño y la respiración están íntimamente relacionados. Durante el descanso nocturno, cualquier alteración en las vías respiratorias superiores puede afectar la entrada de aire y provocar ronquidos, pausas respiratorias o incluso episodios de apnea obstructiva del sueño (AOS). En este contexto, el otorrino es el especialista encargado de estudiar en detalle la anatomía y la función de las vías aéreas superiores: la nariz, el paladar, la faringe y la laringe.
Evaluación de las vías respiratorias
El otorrino realiza una exploración completa mediante endoscopia y otras pruebas diagnósticas para detectar posibles obstrucciones, desviaciones del tabique nasal, hipertrofia de cornetes, amígdalas aumentadas de tamaño o alteraciones en la base de la lengua. Estos factores son determinantes en el origen de los ronquidos y la apnea del sueño.
Diagnóstico complementario
En colaboración con los especialistas en medicina del sueño, el otorrino contribuye al diagnóstico integral del paciente. Su valoración permite correlacionar los hallazgos anatómicos con los resultados de los estudios de sueño, como la polisomnografía, para definir la causa exacta del trastorno y su gravedad.
Tratamientos individualizados
El papel del otorrino no se limita al diagnóstico. También es esencial en el tratamiento, tanto médico como quirúrgico, de los trastornos respiratorios del sueño. En algunos casos, el uso de tratamientos locales, como descongestionantes o dispositivos nasales, puede mejorar la respiración nocturna. En otros, se puede recurrir a cirugías mínimamente invasivas para corregir obstrucciones estructurales y favorecer el flujo de aire durante el sueño.
Colaboración interdisciplinar
El trabajo conjunto entre otorrinos, neumólogos, neurólogos y especialistas en sueño permite diseñar un plan de tratamiento completo y personalizado. En casos de apnea del sueño, por ejemplo, el otorrino puede colaborar en la adaptación de dispositivos CPAP o evaluar la posibilidad de tratamientos alternativos, como los dispositivos orales o quirúrgicos.
El otorrinolaringólogo es una pieza clave en el abordaje integral de los trastornos del sueño. Su conocimiento de la anatomía y función de las vías respiratorias permite identificar y corregir las causas físicas que impiden un descanso adecuado. En la Clínica CISNe, apostamos por un enfoque colaborativo en el que el otorrino trabaja junto a otros especialistas para garantizar un diagnóstico preciso y un tratamiento eficaz, ayudando a nuestros pacientes a respirar y dormir mejor.
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